Como si de una familia se tratara, las empresas también tienen su propio idiolecto. Es decir, en cada una se desarrolla un lenguaje empresarial propio para referirse a sus productos, servicios, procedimientos y cargos.

Las siglas: la pesadilla de traductores e intérpretes

Una de las cosas que más nos lleva de calle a las traductoras e intérpretes de Traductam (y seguro que no somos las únicas) son justamente todas las siglas propias de la empresa en cuestión. Es decir, hay siglas «del sector» o de conocimiento extendido por gran parte de la población, pero luego hay aquellas que se adoptan en una empresa en concreto, aquellas que se copian del inglés y se utilizan un poco indiscriminadamente porque quienes las utilizan han perdido de vista casi completamente su significado extendido.

Recuerdo el caso de una gran multinacional que hablaba constantemente de los productos A. Tras una gran tarea de investigación detectivesca, descubrí que A hacía referencia a «atout». Es decir, eran los «productos baza». Al traducirlo así en mi interpretación, el equipo de comerciales españoles se giró a mirarme, extrañado. Siempre habían dicho «productos A». Entendían bien que se trataba de los productos premium, los mejor vendidos y los que requerían un mimo especial, pero nunca se habían planteado qué significaba esa A. Más tarde, una persona del equipo me agradeció la explicación… ¡por fin sabía a qué se refería «producto A»!

También hay siglas de moda totalmente innecesarias. Cada vez está más extendido el uso de CEO para referirse al presidente o la directora general de una empresa. Sinceramente, si una palabra existe ya en castellano, ¿para qué complicarnos la vida?

Así que ahí va una recomendación general. Al incluir una sigla o un acrónimo, por favor, desarróllalo la primera vez que aparezca en un texto. Así los traductores e intérpretes, pero también el público en general, sabrá exactamente qué significa y luego todo tendrá un mayor sentido.

Coherencia en las comunicaciones

Tener una comunicación fluida y coherente es importantísimo para cualquier comunicación, especialmente en el ámbito de la empresa. Por eso es importante que, a la hora de encargarnos una traducción o interpretación, nos facilitéis algunas pautas básicas de vuestro lenguaje empresarial: vamos a hablar de tú o de usted, en tercera persona del singular o en primera del plural…

Quizás no te hayas planteado todas estas cosas todavía. No te preocupes. Nuestra función de acompañamiento consiste justamente en esto, en plantearte ciertas preguntas para que podamos aclarar algunos puntos y obtener así una comunicación clara, concisa, coherente y eficaz.

Traductam: una única interlocutora

En Traductam nos tomamos muy en serio la comunicación fluida con la clientela. Y, para lograrlo, la comunicación debe ir en ambos sentidos. Nuestras clientas y clientes tienen una única interlocutora –Martine o Montse– con la que tratar todos los temas, y nosotras, en ocasiones, plantearemos dudas para aclarar ciertos conceptos o contenidos y lograr así la calidad óptima que todos buscamos.

En Traductam nos esforzamos para que tu comunicación sea todo un éxito. ¿Colaboramos?

Para profundizar en el tema:

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